El objetivo de la Argentina, quien tiene la presidencia pro témpore, es lograr un consenso en esa materia durante el primer semestre del año.
Al respecto, nuestro país presentó una propuesta alternativa a las posiciones en favor de una reducción lineal y transversal del arancel externo común. La contrapropuesta argentina contempla una reducción diferenciada y no lineal de los aranceles, con énfasis en insumos y materias primas, y tiene en cuenta una segmentación del universo arancelario en cuatro tipos de productos (agropecuarios, industriales, bienes de capital, e informáticos y de telecomunicaciones) y una diferenciación en cinco eslabones según el grado de elaboración de los productos.
La iniciativa argentina contempla las capacidades de los distintos sectores de la economía con fuertes diferencias en materia de competitividad.
Fuente: CEI (Centro de Economía Internacional) Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto de la Argentina.